Tormenta loca

Con la mano del árbitro Ortubé, Argentina logró derrotar en el último minuto a Perú por dos a uno.
Higuaín y Palermo le dieron el triunfo a los albicelestes mientras que Hernán Rengifo le daba el empate momentáneo a los peruanos.

En el primer tiempo los peruanos estuvieron metidos en su campo haciendo imposible el trabajo argentino, Messi. y compañía pisaban campo nacional sin causar mayor daño.
La primera acción de riesgo se dio a los 6 minutos cuando el ‘Cholo Prado quedaba enganchado en la salida de la zaga y Di María metía el pase dejando solo a Higuaín que perdía la oportunidad del primero.

La superioridad en la posesión del esférico era claramente a favor de los argentinos, los nuestros, bien parados en el fondo obstruían el toque de Aimar y Messi.
La segunda oportunidad de gol albiceleste llegaba sobre los 22 minutos esta vez Butrón contra Di María ganaba el duelo.
Así la primera parte del mach terminaba, las tribunas del Monumental de Núñez pifiaban a su escuadra y pedían en grito unánime el ingreso del ‘Loco Palermo.

Para la segunda mitad Maradona hacía caso al pedido del pueblo y mandaba a la cancha al delantero de Boca Juniors.
Perú parecía decidido en la intentona del resultado positivo. La primera acción de peligro se daba en el arco de Sergio Romero, Vargas metía el zapatazo que el golero del AZ Almark desviaba al corner.

En la jugada siguiente llegaba la desilusión para los peruanos.
En otra salida de los zagueros nacionales jugándose el fuera de juego, Higuaín picaba habilitado por Prado y frente a Butrón ponía el grito para los hijos del Diego.
Con la conquista la incertidumbre se apoderó de los argentinos. Los once de Maradona perdían el rumbo.
El mensaje venía desde el banco, Demichelis saltaba al campo por el anotador del gol.

Perú se hacía presente en el juego y buscaba aprovechar el desconcierto che. En una jugada polémica tras un remate de Solano se reclamaba el penal, el balón había impactado en el brazo de un argentino. Sin embargo el boliviano Ortubé no sancionaba.
Los peruanos seguían tocando, por momentos inquietaban al golero Romero.

La alegría se instalaba en el pueblo blanquirojo cuando sobre el minuto 90 con un desborde de Vargas, Prado metía el centro que Rengifo trasformaba en gol.
El estadio de River Plate enmudecía, Perú otra vez les arruinaba la fiesta.
Sin embargo dos minutos después Palermo le devolvía la vida a los argentinos y al Diego con su tanto.

En la última del partido tras un tiro de esquina peruano un penal clarísimo era dejado pasar otra vez por Ortubé que esta vez influyó en el resultado.
Aunque con el sabor amargo de la derrota con ayuda, los peruanos vuelven a casa con el honor de una dignísima actuación en tierras gauchas.